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November 10, 2023Relación entre las emociones y la alimentación.
Guzman Psychotherapy
El primer año de vida desde la Psicología dinámica está ligado a la etapa oral, donde el bebé se alimenta a través del pecho de la madre y establece el mayor de los vínculos emocionales, comenzamos entonces a darle una connotación de importancia y significado a la alimentación relacionada al afecto, a lo emocional.
Por naturaleza somos seres emocionales, es decir, respondemos de distintas formas de acuerdo a las experiencias que estemos atravesando. Sea de forma positiva o negativa. Las emociones en su gran variedad pudieran describir ese momento de vida y conllevan a que el ser humano establezca estrategias de afrontamientos para la gestión de las mismas.
La ingesta de alimentos o inapetencia, puede ser vista como una consecuencia de las emociones por las que transita la persona en ese momento, un claro ejemplo es cuando encontramos el caso de personas que ante la ansiedad por una situación estresante pueden llegar a consumir variedad de alimentos en distintas horas del día, de manera desmedida como una manera de saciar inconscientemente el estado afectivo, algunas de estas conductas pueden en algunos casos identificados conscientemente por quien lo vive, sin saber cómo parar, en otros, no es tan identificable, solo las personas que se encuentran alrededor lo perciben.
Otro ejemplo, que puede evidenciarse como están vinculadas las emociones, o el estado afectivo con la alimentación, es el de personas depresivas o con sintomatología depresiva, donde generalmente disminuyen la ingesta de alimentos, como consecuencia del estado anímico.
Es importante anotar que no en todas las personas que vivencian la ansiedad o la depresión se produce alteración en la alimentación. Las emociones como se mencionó anteriormente se desarrollan de manera diferente.
Conscientemente, personas que manifiestan estar tristes, buscan elevar su estado anímico a través del consumo de azucares “debo comerme un chocolate” “necesito comer helado” con la creencia que al realizar esta acción su estado mejorará, entonces podemos darnos cuenta como cobra especial significado la ingesta de comida o alimentación en los estados emocionales.
Cultural y socialmente, la alimentación también juega un papel importante, a la hora de celebrar o compartir eventos, incluso tristes, las familias, los amigos, se reúnen alrededor de los alimentos para compartir, lo cual nos indica como lo afectivo, emocional se vincula con la representación de la comida.
“La alimentación es un constructo multifactorial en el que las emociones representan uno de los factores socioculturales que en mayor medida motivan la conducta alimentaria (Aranceta Bartrina et al., 2008; Peña Fernández y Reidl Martínez, 2015). En este sentido, la alimentación es un aspecto importante en el sistema emocional y a su vez este sistema emocional es considerado un modulador en el proceso de la alimentación, específicamente en la conducta de consumo. Por lo que, la alimentación y el sistema emocional se rigen por una relación de influencia bidireccional” (Rojas Ramírez y García-Méndez, 2017).
