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Guzman Psychotherapy
Cuando hablamos de amarnos y valonarnos como personas, casi siempre pensamos en amor propio y/o autoestima. Desde la psicología, la autoestima, se puede definir como el grado satisfacción que experimentamos hacia nuestros pensamientos, emociones, conductas, nuestra forma de ser. En resumen, es la forma como nos autoevaluamos.
Ahora bien, la autoeficacia se refiere a la capacidad que poseen los individuos de confiar en sus habilidades en la elaboración de estrategias para alcanzar aquello que desea o resolver situaciones conflictivas, en otras palabras, sentirse capaz de afrontar asertivamente la vida.
Ambos conceptos guardan relación, en la medida en que nos preocupamos por cultivar una autoestima alta, nuestra autoeficacia también se beneficia, a mayor autovaloración más capaces nos sentimos para afrontar los desafíos que nos plantea nuestra vida cotidiana.
¿Te preguntaras, que podemos hacer para fortalecer nuestra autoeficacia?
- Desecha pensar o verbalizar “No soy Capaz”, cuando piensas de esta manera, te trasmites a ti mismo una sensación de inseguridad que se verá reflejada en tus comportamientos. Empieza a pensar “Yo puedo hacerlo”, “Soy capaz”.
- Conviértete en una persona de pensamiento positivo, es decir, no te conformes solo con esperar lo mejor, sino movilízate a desarrollar estrategias que te permitan alcanzar lo que deseas, y sobre todo persiste hasta lograrlo.
- Mantente realista, no pienses en los obstáculos como sinónimo de fracaso, míralos como una oportunidad de reevaluar, aprender, ajustar cambios y continuar avanzando.
- Mantén en revisión constante tus metas, focaliza tus objetivos de acuerdo con tus recursos físicos, emocionales, psicológicos y económicos.
- No permitas que el miedo o la frustración te impidan ser la persona que deseas ser.
A nivel emocional, la autoeficacia, se refiere a la expresión adecuada de sentimientos, pensamientos siempre y cuando no pasemos por encima de quienes nos rodean. Una persona eficaz emocionalmente es aquella que logra defender sus derechos, manifestar desacuerdos o inconformidades sin agredir a los demás.
El ser conscientes de nuestra autoefacia, nos trae una serie de beneficios, dentro de los que podemos mencionar:
- Visión objetiva de la vida, donde los problemas son percibidos como oportunidades de mejora.
- Flexibilidad, nos da la posibilidad de adaptarnos a nuestro entorno.
- Nos ajustamos emocionalmente, podemos comprender que somos nosotros quienes controlamos nuestras emociones y actuamos en consecuencia.
- Somos capaces de ser empáticos, que es el fundamento básico de las relaciones interpersonales.
Recuerda: Además de sentirte bien contigo mismo y valorarte, estas llamando a conocerte en cuanto a tus fortalezas y debilidades, esto te permitirá la próxima que enfrentes una dificultad encontrar los mecanismos para hacerle frente y superarla.